A la hora de afrontar la preparación de lo necesario para irnos, siempre nos preocupa que llevarnos en la maleta y si la climatología nos va a permitir disfrutar del viaje o no. Pocas veces nos planteamos el hecho de que tengamos un percance médico durante nuestra estancia en el extranjero.
Muchos de nosotros ante estas dudas procuramos contratar un seguro de salud temporal que nos cubra los días en los que vamos a estar fuera de casa si el viaje va ser largo. En pequeñas escapadas de fin de semana o puentes de 3 o 4 días, la gran mayoría de la gente deja de lado el tema del seguro de viaje y se lanza a la aventura.
Lo que mucha gente desconoce es que si el viaje que vamos a realizar lo hacemos dentro de la Unión Europea, tenemos un recurso a nuestra disposición que nos permite estar cubiertos en caso de accidente.
¿En qué países puedo utilizar la tarjeta sanitaria europea?
La tarjeta sanitaria europea permite al titular de ella recibir las prestaciones sanitarias que sean necesarias desde el punto de vista médico durante una estancia temporal en cualquiera de los países que forman parte de la Unión Europea, (Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, República Checa, Rumania, Suecia) a los que también sumamos los países del Espacio Económico Europeo (Islandia, Liechtenstein, Noruega) y Suiza.
El portador de la tarjeta sanitaria europea y los beneficiarios a su cargo, consiguen equipararse en igualdad de condiciones en cuanto a tratamientos de salud a cualquier asegurado del país al que se desplaza.
La petición para poder adquirir la tarjeta sanitaria se puede hacer directamente a través de internet accediendo al portal de la administración del estado desde la sede electrónica de la Seguridad Social y será enviada al domicilio que se facilite durante el proceso de solicitud.
El uso de la tarjeta sanitaria europea se reduce a estancias temporales en los países mencionados con anterioridad, excluyéndose los viajes que se hagan con intención de recibir un tratamiento médico específico o los cambios de residencia entre un país y otro.
La validez de este recurso europeo, vendrá indicada en la propia tarjeta, y en algunos casos será necesario el pago de cantidades adicionales si en el país de destino los asegurados deben abonarlas.