La elección de un seguro de salud es una cuestión a la que debemos dedicar un tiempo en el que haremos una tarea de documentación de las ofertas que las diferentes compañías de seguro nos ofrecen.

Lo primero que debemos tener en consideración si el seguro es si la cobertura va a ser individual, es decir, nosotros seremos los únicos asegurados o si por el contrario, la cobertura la queremos ampliar a todo nuestro núcleo familiar con lo que las necesidades serán diferentes.
 

Una vez decidido quién será el asegurado o asegurados, uno de los puntos que declinaran nuestra balanza a la hora de la contratación seré el precio de la prima del seguro.

El coste de un seguro se determina a partir de elementos intrínsecos y elementos extrínsecos.
 

Elementos intrínsecos del precio del seguro

• Edad: Los años que tienes determinan tu probabilidad de enfermar. Aunque se puede ser paciente en todas las etapas dela vida, cuanto mayor seas , más deberás pagar por un seguro. Incluso puede ocurrir que una compañía no acepte clientes a partir de cierta edad. Eso es un motivo para contratar un seguro de salud cuanto más joven seas, siempre es mejor “prevenir que curar”.

• Género: el sexo del cliente es un factor que condiciona el coste en algunos seguros de salud, debido a que en las mujeres cubre las coberturas por embarazo y parto. Desde hace unos años y en algunos tipos de seguro, estas coberturas no deben afectar al precio.

• Zona geográfica: los precios pueden variar según la zona geográfica donde vivas, por lo que pueden ser diferentes según la provincia de residencia habitual.
   

Elementos extrínsecos del precio del seguro

• Copago: es una pequeña cantidad de dinero que abonas cada vez que usas tu seguro. Puedes optar por contratar un seguro con copago o sin él. Acogiéndote a esta opción, la cuota fija que pagues, mensual o anualmente, será más reducida a cambio de que abones esa pequeña cantidad por cada servicio cuando hagas uso de él.

• Grupos: los grupos y colectivos, al aportar una entrada numerosa de asegurados, reducen sensiblemente el importe que paga cada integrante de ese grupo.

• Limitación de coberturas: Existen un amplio abanico de coberturas que puedes añadir a tu seguro. A cuantas menos coberturas te acojas menor será la cantidad que debas abonar. Limitar los servicios es limitar el gasto, reducir el coste del seguro. Antes de renunciar a determinadas coberturas, busca un asesoramiento médico que te informe de las posibilidades que tienes de enfermar de determinadas patologías en el futuro.
   

El precio siempre es una variable importante a la hora de contratar cualquier servicio pero en casos en el que el servicio ofrecido tenga relación con la salud, debemos considerar otros parámetros adicionales para poder elegir el seguro que mejor se adapte a nuestras necesidades.