La iluminación conforma una parte sustanciosa del consumo de energía en una casa, por lo que es importante conocer qué tipos de bombilla existen en el mercado
Hacer cambios en nuestros hábitos para dirigirnos hacia un estilo de vida más consciente con la sostenibilidad pasa por la elección de productos que sean más respetuosos con el planeta para reducir lo máximo posible su impacto negativo en el medioambiente. En este sentido, incluso un objeto tan pequeño como una bombilla tiene una gran trascendencia en esta transición, puesto que representan un porcentaje importante del consumo de energía en nuestros hogares. Por esta razón, saber cuáles son los distintos tipos de bombillas que se comercializan hoy en día nos dará la clave para elegir la opción más adecuada para nuestras necesidades que nos permita hacer más efectivo y sostenible nuestro consumo de luz y que, por qué no, nos ahorre dinero a largo plazo.
La evolución de las bombillas
Desde que a finales del siglo XIX el inventor estadounidense Thomas Edison patentara la primera hecha de filamento de tungsteno contenida dentro de una ampolla de cristal, la bombilla ha experimentado incontables transformaciones y mejoras a lo largo de los años. El deseo de llevar la luz a todos los hogares provocó que hubiese que ir desarrollando diferentes materiales para abaratar su coste de producción y hacerlas accesibles a más compradores. Con el paso del tiempo, esta preocupación se centró cada vez más en cómo hacer un producto más eficiente y duradero con el menor impacto ambiental posible.
Con el objetivo de dar pasos hacia delante para una Europa más sostenible, la Unión Europea ha ido implementando diferentes directivas desde el año 2009 que se volvían cada vez más exigentes en cuanto a la eficiencia energética de las bombillas que iluminan los hogares europeos.
Así, para impulsar el uso de tipos de bombilla más ecológicas, la UE decidió prohibir en un primer momento las conocidas como bombillas incandescentes para luego incluir en esta lista las lámparas halógenas en 2018 con el fin de iniciar una transición acelerada hacia las alternativas LED.
De igual manera, se establecieron unas normas de etiquetado energético que repercute en electrodomésticos y otros aparatos electrónicos que clasifica los productos de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente) con un código de colores similar al de un semáforo para informar al consumidor sobre la eficiencia energética y promocionar un consumo más sostenible de la energía.
Los tipos de bombillas
Como hemos visto, a lo largo de los años ha habido algunos tipos de bombilla que se han ido retirando paulatinamente del mercado a favor de una apuesta energética mucho más eficiente, durable y en línea con la lucha contra el cambio climático. Estos son los modelos más habituales de bombillas:
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Bombillas incandescentes
Esta es una de las bombillas que ya no podrás encontrar en el mercado. Por el tipo de materiales que la componían, esta bombilla era muy poco eficiente dado que perdía mucha energía calentando el cristal, además de que solo aguantaban alrededor de 1.000 horas antes de fundirse, generando más desechos. Curiosamente y a pesar de su presumible corta vida, la bombilla que más tiempo lleva encendida está en un parque de bomberos de California, que funciona ininterrumpidamente desde el año 1901.
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Bombillas halógenas
Hace ya algunos años que nos empezamos a despedir de este tipo de bombilla debido a la alta cantidad de energía que demandaba para funcionar. A pesar de que todavía podamos encontrarlas en nuestras casas, si se funde tendremos que sustituirla por un modelo más eficiente. Estas bombillas no se pueden reciclar y pueden llegar a durar hasta 2.000 horas.
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Bombillas fluorescentes
Está integrada por una tecnología que combina gases y sales que emiten luz gracias a una corriente eléctrica. Reduce en gran cantidad el consumo de la bombilla incandescente sin comprometer la capacidad lumínica. Son más difíciles de reciclar, por lo que se recomienda llevarlas a un punto limpio, y dura entre 5.000 y 10.000 horas
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Bombillas de bajo consumo
Su precio es más económico que el de las bombillas LED, pero su vida útil es más corta y en la práctica emplea algo más de energía que las bombillas LED. Se pueden reciclar como material electrónico y pueden durar hasta 10.000 horas
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Bombillas LED
Tiene la vida útil más larga de todas y utiliza menos energía que las bombillas de bajo consumo, pero resulta en líneas generales más costosa. Se pueden reciclar como material electrónico y su durabilidad es de hasta 50.000 horas.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿Qué tipos de bombillas hay?
Hasta hace unos años, podíamos encontrar bombillas incandescentes y bombillas halógenas en las tiendas, pero tras la puesta en marcha de una directiva de la Unión Europea para impulsar una iluminación sostenible y duradera, estas se han dejado de comercializar. Por tanto, los dos tipos más frecuentes que podemos encontrar hoy son las bombillas de bajo consumo, los fluorescentes y las bombillas LED.
¿Cómo sé si una bombilla es eficiente?
Las bombillas, al igual que otros productos electrodomésticos, cuentan con un etiquetado energético sencillo de interpretar pensado para clasificar de la A a la G un producto según su mayor (A) o menor (G) eficiencia energética.
¿Cuánta vida útil tiene los tipos de bombillas más eficiente?
El tipo de bombilla de mayor eficiencia energética es el LED. De acuerdo con los fabricantes, las bombillas LED pueden llegar a tener una durabilidad de hasta 50.000 horas, lo que la convierte por mucho en la opción más ecológica y efectiva para la iluminación de nuestro hogar.
¿Cómo se reciclan las bombillas?
La composición de los materiales de cada tipo de bombilla será la clave para saber la manera más correcta y respetuosa con el medioambiente de deshacernos de nuestras bombillas con el menor impacto en el planeta posible. Tanto las bombillas LED como las de bajo consumo, al no contener materiales tóxicos, pueden ser descompuestas sin riesgos en componentes menores y ser recicladas como material electrónico. El caso de las bombillas fluorescentes es diferente, ya que tiene mercurio, por lo que recomendamos que se lleven a centros de reciclaje especializados. Algunas tiendas en las que venden este tipo de bombilla también las recogen para enviarlas a las compañías recicladoras pertinentes.